Para que en la República Dominicana el salario tenga poder adquisitivo, el país debe implementar una política clara de aumento real, que reconozca la situación del sector productivo, señaló ayer Leonardo Ferreira, director adjunto para RD, Haití y Panamá de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
“Es fácil aumentar el salario por decreto, pero aumentar de manera sostenida, con incrementos reales a través del diálogo, es la vía”, precisó.
Dijo que tal vez no se vea hoy en día un incremento real de poder adquisitivo de los salarios, porque la vía es aumentar de manera real, que gradualmente se haga crecer el salario mínimo de manera real, pero, insistió, reconociendo cuál es la característica del sector productivo del país.
“Ver cuáles son las limitantes y que le puede imponer al sector privado un aumento del salario. Pero es necesario una política de crecimiento real del salario mínimo a lo largo del tiempo, porque es la vía más idónea para llegar a un mejor poder adquisitivo”, indicó.
Explicó que no se puede hacer un incremento por decreto que aumente de un solo golpe de manera fuerte, pero que en la práctica no cumpla.
El representante del organismo internacional manifestó que el mercado laboral dominicano tiene retos, al igual que muchos otros países, pero uno en específico es la formalización, que depende mucho de una capacidad de generar puestos de trabajos formales.
Dijo que se debe avanzar en medidas que ayuden el tránsito hacia la formalidad. “Un trabajo decente significa un trabajo en mejores condiciones de seguridad y salud ocupacional, por eso es importante trabajar en esa temática a través del diálogo tripartito”, añadió.
Ferreira ofreció estas declaraciones luego de participar en la presentación de la Escuela de Mediación Laboral, con la cual el Ministerio de Trabajo busca impulsar y fortalecer el servicio de mediación laboral, resolución de conflictos laborales y a su vez brindar capacitación a funcionarios, empleadores y trabajadores privados.
En tanto el ministro de Trabajo, Luis Miguel De Camps, dijo que “con la creación de la escuela hemos agotado un minucioso proceso con miras a corregir una debilidad histórica en el sistema laboral dominicano en lo que concierne al surgimiento de conflictos entre empleadores y trabajadores”.
El funcionario aseguró que hay una visión clara de fortalecer los espacios de diálogo y a su vez la democracia, reconociendo la voluntad de los sectores en la búsqueda de soluciones de consenso.