El presidente Luis Abinader ha materializado uno de sus anuncios de rendición de cuentas del 27 de febrero de 2021: el comienzo de la primera fase de la verja perimetral “inteligente” en la frontera de la República Dominicana con Haití.
Ayer domingo, el mandatario realizó una de las rutas más largas de su gestión: de Santo Domingo a Punta Cana, donde comenzó un proyecto del Grupo Puntacana; y de Punta Cana a Dajabón, lugar donde dejó iniciados los trabajos de los primeros 54 kilómetros del muro divisorio, cuya inversión es de RD$1,700 millones, RD$300 millones menos de lo que se presentó en el presupuesto general de 2022.
Se trata de un muro, que el Gobierno lo cataloga de “inteligente”, puesto que contará con un sistema de vigilancia con sensores de movimientos, radares de iluminación, centro de mando, videovigilancia, torre de comunicación y unidades aéreas no tripuladas.
En los próximos días Abinader indicó que se instalará un sistema avanzado de control biométrico para el registro de las personas. El software, diseñado por una empresa alemana, utiliza el sistema ABIS, que conjuga las huellas dactilares con fotografías, lo cual permite identificar con un mínimo margen de error a una persona.
El objetivo, según el jefe de Estado, es acabar con el contrabando, robos, crimen organizado, narcotráfico y la inmigración irregular, lo que ha sido un verdadero dolor de cabeza para todos los gobiernos dominicanos.
El muro, que finalizará en nueve meses, será de hormigón armado y estructura metálica, y tendrá 19 torres de control, 10 puertas de acceso para patrullaje por parte de los más de 10 mil militares apostados en los límites.
“Esta primera parte se levantará en las zonas pobladas y sensibles de la línea fronteriza y la construcción empieza simultáneamente en seis frentes ubicados en las cinco provincias fronterizas”, expuso el mandatario en un acto al que asistieron sus principales servidores públicos.
En el segundo semestre de este año se licitará la segunda etapa, que abarcará 110 kilómetros, y cuya construcción se pondrá en marcha tan pronto concluya la primera.
Cuando se termine la obra, los 164 kilómetros de verja “inteligente” se sumarán a los 23 que se construyeron en el gobierno del expresidente Danilo Medina entre Elías Piña y Jimaní, al sur del país. En total serán 187 kilómetros de muro, que cubrirán un 49 % de los 380 kilómetros que mide la frontera domínico-haitiana.
Según las autoridades no será necesario colocar muros en las zonas montañosas, sino que será en los puntos vulnerables.
Todavía en Haití falta mucho para ver la luz al final del túnel. Tras la muerte de su presidente, Jovenel Moïse, y el terror que han puesto las bandas armadas, Abinader ha elevado las voces para que la comunidad internacional ayude a gestionar una solución para ese país.
Panamá, Costa Rica y Argentina han mostrado interés en ayudar, pero “pero si Estados Unidos no actúa, nadie va actuar” con la situación de Haití, indicó el mandatario durante un encuentro con intelectuales, en diciembre pasado.
Fuente: Diario Libre